INFRAESTRUCTURA

 

La Región Centro es un polo productivo estratégicamente
ubicado y conectado; cuenta con una sólida infraestructura
para la producción y exportación.

Punto estratégico de apertura hacia el mundo.
La Región Centro conforma un territorio que mantiene fuertes lazos con el resto del mundo. Prueba de esto es su coeficiente de apertura, que supera en más del doble al promedio argentino. En este marco, se están planteando alianzas interregionales con otros bloques sudamericanos, como las regiones Centro-Oeste y Sur de Brasil, Uruguay y la Región Central de Chile. Dichas alianzas darán un verdadero significado económico y social al Corredor Bioceánico Central, que comunica los puertos del Atlántico con los del Pacífico.

Corredor Bioceánico e Hidrovías
El Sistema de Autopistas Regionales utiliza las conexiones físicas sobre los ríos Paraná y Uruguay (puentes, túnel subfluvial, represa Salto Grande, etc.) y se complementa con una moderna red de caminos que favorece el desarrollo territorial y un mayor flujo de cargas y pasajeros.

Puertos y vías navegables
La Región es atravesada de norte a sur por la Hidrovía Paraná– Paraguay (a la cual llega la Hidrovía Paraná Tieteé) y por la Hidrovía del Río Uruguay. Esto facilita la navegación y el transporte comercial, permitiendo el desarrollo, modernización y eficiencia de las operaciones y favoreciendo así el acceso a los mercados de ultramar en condiciones altamente competitivas. Los importantes puertos, junto con la red de transporte terrestre y ferroviario, dinamizan las actividades productivas de la Región Centro.

La industria manufacturera
La industria manufacturera, con su aporte del 18% al producto bruto regional, lidera la dinámica económica de la Región Centro. La producción agropecuaria es la base de una poderosa agroindustria, donde se destacan los molinos de trigo, maíz y arroz, modernos frigoríficos exportadores, fábricas de jugos naturales y usinas lácteas.
Por su magnitud, el complejo oleaginoso se encuentra entre los mayores del mundo. Se concentra en torno al Gran Rosario y a su sistema portuario. Con 28 plantas de la más avanzada tecnología, la Región dispone del 87% de la capacidad de molienda argentina, que le permite moler más de 30 millones de toneladas de granos y originar más del 90% de la producción nacional de aceites. La fabricación de maquinaria agrícola y de diversos implementos tiene una fuerte presencia dentro de la industria metalmecánica. Las tres cuartas partes de las firmas dedicadas a la producción de maquinaria agrícola en el país se ubican en la Región Centro. Las industrias metalmecánicas alcanzan un alto grado de desarrollo, destacándose la producción automotriz, sector en el cual la Región tiene una conocida trayectoria participando con la tercera parte de la fabricación de automóviles del país. Estas actividades de larga tradición coexisten con otras ramas industriales de fuerte crecimiento reciente, como la industria electrónica e informática. Los productos fabricados por estas nuevas empresas tecnológicas son diversos e incluyen, entre otros: desarrollo de software (estándares y especiales) para telecomunicaciones y otras aplicaciones; fabricación de hardware para telecomunicaciones; aparatos de electromedicina; balanzas electrónicas; estabilizadores de tensión; y ensamblaje de computadoras personales. Se destaca la creación de los polos electrónico- informáticos de Córdoba y Rosario. La petroquímica también tiene cabida dentro de la estructura productiva regional, con un conjunto de empresas que elaboran ácido sulfúrico, sulfato de aluminio, sulfhidrato de sodio y sulfuro de carbono, entre los productos más relevantes.

Ordenamiento industrial
El desarrollo de la producción se ve apoyado por 99 aglomeraciones productivas, entre las cuales se destacan 30 parques y 26 áreas industriales registradas en el Registro Nacional de Parques Industriales de la Nación. Se trata de predios planificados, dotados de infraestructura, equipamiento y servicios comunes, aptos para la localización de industrias, con normativas internas y administrados por un ente promotor.
Esta gran concentración productiva le otorga protagonismo a la Región en el ámbito nacional y se complementa con otras aglomeraciones de empresas en clústers, polos y parques tecnológicos, en cuya conformación y gestión intervienen los gobiernos locales, las universidades y las cámaras empresariales. Con ello se ha logrado un desarrollo altamente organizado de la comunidad industrial.
El sector privado ha contribuido al progreso de la Región y a su inserción continental y mundial. Varias empresas establecidas en la Región poseen una reconocida trayectoria internacional.

Fuente: CFI